LOS PERROS HAMBRIENTOS DE CIRO ALEGRÍA

 

        Los perros hambrientos" de Ciro Alegría es una de esas obras. Publicada en 1939, esta novela la novela aborda el tema del hambre y su influencia entre los hombres en su relación con la naturaleza y con los animales, simbolizados éstos en los perros. Como los humanos, también los perros se vuelven malos ante el hambre y hasta llegan a odiarse, matarse y devorarse entre ellos. El gran drama de Los perros hambrientos es también la tierra, despiadada si se cierran las compuertas del cielo para quienes no tienen otra forma de riego que aguardar, sólo desafiar una prolongada sequía con los ojos al cielo, la primicia de la bondad ecológica, lo que no ocurre con los gamonales que tienen las acequias.

       El paisaje que describe es inclemente, lóbrego y despiadado por el rigor de la naturaleza. Un cura que muere de amor, un santo que no hace milagros. Aparecen los típicos bandoleros que tanto gustaban a Alegría, que también tienen un trágico final, cercados por la policía y envenenados.

FRAGMENTO 1

Un cura dizque taba queriendo mucho onde una niña, pero siendo él cura, la niña no lo quería onde él. Y velay que di un repente murió la niña. Yentón el cura, e tanto que la quería, jue y la desenterró y la llevó onde su casa. Y ay tenía el cuerpo muerto y de una canilla el cuerpo muerto hizo una quena y tocaba en la quena este yaraví, día y noche, al lao el cuerpo muerto e la niña… Y velay que puel cariño y tamién po esta música triste, tan triste, se volvió loco… Y la gente e poray que oía el yaraví día y noche, jue a ver po qué tocaba tanto y tan triste, y encontró al lao el cuerpo muerto, ya podrido, e la niña, llorando y tocando. Le hablaron y no respondía ni dejaba e tocar. Taba, pues, loco… Y murió tocando… Tal vez pues aúllan los perros… Vendrá el alma el curita al oír su música, yentón los perros aúllan, poque dicen que lucen así al ver las almas…

La Antuca dijo:

—Es que muy triste… No lo toques…

Pero en el fondo de sí misma deseaba oírlo, sentía que el desgarrado lamento del Manchaipuito le recorría todo el cuerpo proporcionándole un dolor gozoso, un sufrimiento cruel y dulce. La cauda temblorosa de la música le penetraba como una espada a herirle rudamente, pero estremeciéndole con un tremor recóndito las entrañas.

Ciro alegría (1939) pag.1

        En este fragmento de la obra” los perros hambrientos” de ciro alegría nos habla de Pancho, un joven aficionado al canto y que toca la antara, relata la macabra historia conocida como El Manchaipuito, esta narración trata sobre un cura que enloqueció por el amor de una muchacha y que muere tocando una quena junto al cadáver desenterrado de su amada, Asimismo un relato corto pero poderoso que explora las emociones humanas más profundas. La historia deja una impresión en el lector y lo invita a reflexionar sobre la naturaleza del amor, la pérdida y la locura. Finalmente "El Manchaipuito" es una historia corta que se concentra en temas como el amor, la pérdida, la locura y la muerte, utilizando la música como un elemento central para transmitir las emociones de los personajes como son el cura. La narrativa explora la dificultad de las reacciones humanas ante el dolor y la belleza, dejándonos una profunda impresión al lector.

FRAGMENTO 2

Zambo y Wanka vinieron de lejos. Para hablar más precisamente: los trajo el Simón Robles. Eran muy tiernos aún y tenían los ojos cerrados. De tenerlos abiertos, habrían visto menos. Viajaban en el fondo de una concavidad que hizo su conductor doblando, con la ayuda del antebrazo y la mano, la falda delantera del poncho. Acaso sintieron, sin saber de lo que se trataba, un continuo e irregular movimiento. Lo producía el trote de un caballo por un largo camino lleno de altibajos. Los perrillos provenían de Gansul, de la afamada cría de don Roberto Poma. Ciro alegría (1939) pag.14

        En este fragmento de la obra empiezan las historias de los perros cuyas vicisitudes acompañan toda la obra nos cuenta cómo a Zambo y Wanka los trajo desde lejos Simón Robles desde muy pequeños. Asimismo, valoramos el viaje de simón robles nos permiten conectar con la experiencia de los cachorros y reflexionar sobre temas como los nuevos comienzos, la adaptación y el vínculo entre humanos y animales. Para finalmente nos presenta una breve pero significativa descripción del viaje de los aun cachorros sambo y wanka hacia su nuevo hogar, destacando su fragilidad, sensaciones y el simbolismo del viaje como metáfora de un nuevo comienzo. La narrativa despierta la curiosidad y la ternura hacia los protagonistas, invitando a imaginar su adaptación y crecimiento en su nuevo hogar.

FRAGMENTO 3

Aprendiendo del Simón, y frecuentemente ayudados por él mismo, relataremos también otras muchas importantes historias. Acaso sean puestas en duda, ya que la verdad es, en algunas ocasiones, tan paradojal o triste, que el hombre busca razones para el ingreso de la incertidumbre. Y en esto se parece —hablando en genérico y salvando, en cada situación, las distancias precisas— a cierto curita de la provincia de Pataz. Era un sacerdote humilde e ignaro, de la cuerda de aquellos indios beatos a quienes el obispo Risco de Chachapoyas, después de enseñarles unos cuantos latinajos, tonsuró y echó por el mundo —en este caso el mundo era la sierra del Norte del Perú— a desfacer entuertos de herejía.

Nuestro buen curita predicaba una vez el famoso Sermón de Tres Horas en la iglesia del distrito de Siguas. Puso mucha emoción, gran patetismo, en relatar los padecimientos y muerte de Nuestro Señor. El resultado fue que casi todos los aldeanos feligreses, en especial las viejas pías, se pusieron a gemir y llorar a moco tendido. Confundido el curita por el efecto de sus palabras y no sabiendo cómo remediar tanto dolor, dijo al fin:

—No lloren, hermanitos. Como hace tanto tiempo, quién sabe será cuento… Ciro alegría (1939) pag.34

        En este fragmento de la obra una de las historias que oímos de boca del narrador es. El sermón comentado por un curita de Pataz. El personaje de esta anécdota es presentado como un sacerdote humilde, que aprendió unos cuantos latinajos y a quien el obispo de Chachapoyas echó por el mundo, además en esta muy válida, ya que resalta la importancia de la responsabilidad y el compromiso en la tenencia de mascotas, promoviendo así un cambio positivo en la vida de los perros y finalmente reflexionamos sobre el poder del relato, la complejidad de la fe y la naturaleza de la verdad. La historia del cura y sus feligreses nos deja con preguntas sobre la forma en que interpretamos el mundo y cómo nos relacionamos con nuestras creencias.

 

FRAGMENTO 4

El Mateo Tampu, indio prieto, de recia musculatura y trotón andar, llegó un día a casa de su suegro. En pies y manos tenía aún la tierra de las chacras.

  —Taita, quierun perrito.

 El Simón Robles, sentado a la puerta de su bohío, estuvo un momento chasqueando la lengua al regalarse con la dulzura de su coca y luego respondió lo que era de esperarse:

 —Empúñalo, pue.

 El Mateo fue al redil y cogió un perrillo de los que dormían en un montón de paja esperando la vuelta de sus madres adoptivas. Ya hemos dicho que entre ellos estaban Güeso y Pellejo. Eran muy pequeños aún para seguir a la manada. Después, la Juana inquirió:

—¿Y la Martina?

  —Ya güena.

 El cachorro se puso a mañosear y gemir. Entonces el Mateo lo aprisionó en un lado de su alforja al coserla en torno del cuerpecillo cálido y palpitante, pero dejando la cabeza libre.

—Me voy, pue —dijo cuando concluyó su tarea, a la vez que se echaba al hombro su prisionero. Él miraba desde lo alto con ojos medrosos y sorprendidos.

—Quédate tuavía —invitó el Simón.

 —Quédate, comerás alguito —reiteró la Juana.

  —No, si la yerba me gana —dijo el Mateo.

Él era quien ganaba a la yerba. Tenía fama de trabajador. En sus limpias chacras prosperaban las siembras.

 —Adiosito, pue —terminó.

  Y, a trote rápido, cogió su camino. 

        En este fragmento nos presenta a Manu. Un vástago de Wanka, pequeño aún, es llevado a casa del Mateo Tampu y allí hace muy buenas migas con el niño Damián entonces es muy positiva, ya que destaca el trabajo valioso realizado por aquellos que se preocupan por el bienestar de los perros hambrientos, brindándoles una oportunidad de tener una vida mejor, finalmente con Simón Robles y Juana refleja la familiaridad y simpleza de la vida rural. La petición de un cachorro por parte de Mateo y la respuesta de Simón, "Empúñalo, pue", señala una relación directa y sin formalidades. La elección del cachorro más pequeño y la reacción de este al ser separado de su madre, añaden un toque de ternura y sensibilidad a la escena. La despedida de Mateo, con su frase "No, si la yerba me gana", reitera su dedicación al trabajo y su compromiso con la siembra

CONCLUSIÓN:

"Los Perros Hambrientos", es un poderoso
retrato social, la historia de los olvidados…de ayer,
de hoy y de siempre.

Debilidad de la
obra:

Ciro Alegría, en su obra, muestra la
realidad de las comunidades andinas con la dureza tal
cual es, pero en determinados momentos se hace muy dura
la realidad, de tal manera que pareciera
ficticia.

Esta obra muestra mucho valor en la literatura peruana, "Los Perros Hambrientos", es el reflejo de una sociedad
agraria en condiciones durísimas, sin moneda, donde se
desarrolla el trueque con los pocos excedentes que producen la
tierra y el ganado, en su mayoría ovejero. En este relato
se entremezclan la vida de los pastores, los bandoleros y los
agricultores, incluso se pueden practicar todos estos oficios a
la vez. Las mujeres se dedican a tejer y a la artesanía
manual, aunque
también sacan los rebaños y cuidan el bohío,
la choza. Los bandoleros, lo son por las penurias de la vida en
el norte de los andes, en los alrededores del río
Marañón. También hay un apartado de la
novela que refleja la vida de estos bandoleros, pero no se matiza
el porqué de esta situación; aunque la evidencia
puede hacer pensar en las penurias de los que no tiene

REFERENCIAS

Rodríguez, I. C. M. (2007, 21 junio). "Los Perros Hambrientos" de Ciro Alegría. Monografias.com. https://www.monografias.com/trabajos14/perros-hambrientos/perros-hambrientos

Rodríguez, I. C. M. (2007, 21 junio). Pag 1-2

. https://www.monografias.com/trabajos14/perros-hambrientos/perros-hambrientos

Rodríguez, I. C. M. (2007, 21 junio). Pag 14

. https://www.monografias.com/trabajos14/perros-hambrientos/perros-hambrientos

Rodríguez, I. C. M. (2007, 21 junio). Pag 32

. https://www.monografias.com/trabajos14/perros-hambrientos/perros-hambrientos