Buscar este blog

miércoles, 10 de julio de 2024

LOS PERROS HAMBRIENTOS DE CIRO ALEGRÍA




Los perros hambrientos:

-       Mishico, el perro viejo, miró con recelo el pedazo de carne que le ofrecía el niño. Olfateó la carne con desconfianza, y luego la tomó con recelo entre sus dientes gastados. La masticó lentamente, saboreando cada bocado como si fuera el último. (Alegría, C. (1936). Los perros hambrientos.  Lima, Perú: Editorial Juan Mejía Baca.)

        En este fragmento nos presenta una escena conmovedora que refleja la profunda conexión entre un niño y un perro viejo. Mishico, el perro, reacciona con recelo ante el pedazo de carne que le ofrece el niño, olfateándolo con desconfianza y tomándolo con cuidado entre sus "dientes gastados”. La descripción de Mishico masticando la carne "lentamente" y "saboreando cada bocado como si fuera el último" revela la intensidad de su hambre y la gratitud que siente hacia el niño por su gesto de amabilidad.

        El lenguaje fue sencillo y emotivo para transmitir la ternura del momento, destacando la bondad del niño y la lealtad del perro. El fragmento también resalta la capacidad de los animales para formar lazos afectivos con los humanos. A pesar de las difíciles circunstancias en las que viven, Mishico y el niño encuentran consuelo y compañía en la mutua compañía. La escena nos recuerda la importancia de la compasión y la empatía hacia los seres vivos, especialmente en situaciones de necesidad.

Al tercer día, la sed apretaba más que el hambre. Los perros ladraban con roncas voces, mostrando las lenguas secas y polvorientas. En la quebrada no había una gota de agua. Los indios, resignados, miraban el cielo plomizo, sin esperanza. (Alegría, C. (1936). Los perros hambrientos. Lima, Perú: Editorial Juan Mejía Baca.)

        Este fragmento nos da a entender en la cruda realidad de un grupo de personas que se enfrentan a dos fuerzas implacables: la sed y el hambre. La descripción vívida de los perros ladrando con "roncas voces" y mostrando sus lenguas "secas y polvorientas" crea una imagen palpable de su sufrimiento. La resignación de los indios, que "miraban el cielo plomizo, sin esperanza", intensifica la sensación de desolación y desesperanza que impregna la escena. Alegría utiliza un lenguaje sencillo y directo para transmitir la intensidad de la situación. La frase "la sed apretaba más que el hambre" resalta la precariedad de su condición, donde incluso la necesidad básica de agua supera la del alimento. La comparación del cielo con un color "plomizo" evoca una atmósfera sombría y opresiva, reflejando la falta de esperanza que embarga a los personajes.

La luna llena iluminaba la quebrada con una luz fría y plateada. Los perros aullaban a la luna, como si le imploraran por agua. Sus aullidos lastimeros resonaban en la noche, creando una atmósfera de tristeza y desolación. (Alegría, C. (1936). Los perros hambrientos. Lima, Perú: Editorial Juan Mejía Baca.)

      En este fragmento de "Los perros hambrientos", Ciro Alegría crea una atmósfera de profunda tristeza y desolación a través de la descripción de la luna llena, los aullidos de los perros y el eco que resuena en la quebrada. La "luna llena" que ilumina el paisaje con una "luz fría y plateada" contrasta con la calidez que se espera de este astro, intensificando la sensación de desolación. Los aullidos de los perros a la luna, descritos como "lastimeros", representan una súplica desesperada por agua, un elemento vital que les ha sido negado. El uso del verbo "implorar" resalta la intensidad de su necesidad y la impotencia ante la situación. El eco de los aullidos "resonando en la noche" amplifica la tristeza y la desolación del paisaje. La imagen crea una sensación de vacío y soledad, como si la propia naturaleza se compadeciera del sufrimiento de los perros. Alegría utiliza un lenguaje sensorial y evocador para crear una imagen vívida en la mente del lector. Logra transmitir la intensidad de las emociones que embargan a los perros y al entorno que los rodea.

Al fin, después de muchos días de sufrimiento, la lluvia llegó a la quebrada. Los perros ladraban de alegría mientras saltaban y corrían por la tierra mojada. Los indígenas también sonreían, aliviados por el fin de la sequía. (Alegría, C. (1936). Los perros hambrientos. Lima, Perú: Editorial Juan Mejía Baca.)

    El fragmento final de "Los perros hambrientos" de Ciro Alegría nos presenta un contraste conmovedor entre la alegría desbordante de los perros y el alivio de los indígenas ante la llegada de la lluvia, después de un largo período de sequía y sufrimiento. La descripción de los perros ladrando de alegría mientras "saltaban y corrían por la tierra mojada" refleja la intensidad de su felicidad por el agua tan esperada. La imagen contrasta con la desolación y la desesperación que caracterizaban los fragmentos anteriores, creando una sensación de liberación y esperanza. Los indígenas, por su parte, también sonríen, "aliviados por el fin de la sequía". Su sonrisa refleja el alivio y la gratitud por la llegada del agua, un elemento vital para su supervivencia y la de sus cultivos. Alegría utiliza un lenguaje sencillo y directo para transmitir la alegría y el alivio que embargan a los personajes. La frase "Al fin, después de muchos días de sufrimiento" resume la tensión acumulada durante la sequía y resalta la intensidad de la felicidad que produce la llegada de la lluvia. El fragmento es un ejemplo de la capacidad de Alegría para capturar emociones y transmitirlas al lector de manera efectiva. A través de la descripción de la reacción de los perros y los indígenas ante la lluvia, Alegría nos recuerda la importancia de este elemento vital y la alegría que su llegada puede generar en aquellos que han sufrido por su ausencia.

        Finalmente, los fragmentos analizados, nos sumergen en la cruda realidad de un grupo de personas y animales que luchan por sobrevivir en un entorno hostil. A través de la descripción vívida de sus experiencias, Alegría nos transmite la intensidad de su sufrimiento, la desesperación por encontrar agua y alimento, y la esperanza que surge con la llegada de la lluvia. Los perros, protagonistas indiscutibles de la historia, representan la resiliencia y la capacidad de adaptación ante las adversidades. Los indígenas, por su parte, reflejan la sabiduría ancestral y la conexión profunda con la tierra.

Reseña de la obra “LOS PERROS HAMBRIENTOS”

Introducción:

"Los perros hambrientos" es una obra emblemática del autor peruano Ciro Alegría, publicada por primera vez en 1939. La novela se sitúa en los Andes peruanos y relata la vida de una comunidad campesina y su lucha contra las adversidades naturales, principalmente la sequía y el hambre. Ciro Alegría, un destacado escritor del movimiento indigenista, utiliza su narrativa para exponer las difíciles condiciones de vida de los campesinos andinos y su relación con la naturaleza.

Esta reseña pretende analizar las principales características de la obra y ofrecer una valoración crítica sobre su relevancia y contribución a la literatura peruana e indigenista.

Análisis del Material de Estudio

Contexto y Temática

"Los perros hambrientos" se desarrolla en un contexto rural andino, donde la naturaleza es tanto un proveedor generoso como un adversario implacable. La novela comienza describiendo la vida cotidiana de los campesinos, su dependencia de la tierra y el ganado, y la estrecha relación que mantienen con sus perros. Estos animales no solo son compañeros fieles, sino también vitales para la supervivencia de sus dueños, ayudándoles en la caza y el pastoreo.

La sequía prolongada que azota la región es el conflicto central de la novela. Este fenómeno natural pone a prueba la resistencia física y emocional de los personajes, así como la cohesión de la comunidad. Alegría utiliza la sequía como una metáfora de las dificultades perpetuas que enfrentan los campesinos, reflejando la injusticia social y la falta de apoyo por parte del gobierno. La descripción de la tierra árida y el sufrimiento de los animales y las personas es vívida y conmovedora, creando una atmósfera de desesperación y lucha constante.

Personajes y Simbolismo

Los personajes de "Los perros hambrientos" son representaciones arquetípicas de los campesinos andinos. El patriarca de la familia, Don Cipriano, es un hombre de principios firmes y una fuerte conexión con la tierra. Sus hijos, que lo ayudan en las labores diarias, reflejan la juventud y la esperanza en medio de la adversidad. Sin embargo, son los perros los que ocupan un lugar central en la narrativa. Alegría humaniza a estos animales, dándoles personalidades distintivas y destacando su lealtad y sacrificio.

El simbolismo en la obra es profundo y multifacético. Los perros, que enfrentan su propia batalla contra el hambre, simbolizan la fidelidad, el sacrificio y la lucha por la supervivencia. La relación entre los perros y sus dueños es una alegoría de la interdependencia entre los seres humanos y la naturaleza. La sequía, por otro lado, simboliza las adversidades perpetuas que enfrentan los campesinos, tanto naturales como sociales. Alegría utiliza estos elementos simbólicos para criticar la situación socioeconómica de su tiempo y abogar por una mayor justicia social.

Estilo y Lenguaje

El estilo de Ciro Alegría en "Los perros hambrientos" es característico del realismo social. Su prosa es detallada y descriptiva, permitiendo al lector visualizar el paisaje andino y sentir las emociones de los personajes. Alegría emplea un lenguaje rico en imágenes sensoriales, que transporta al lector a la dura realidad de los campesinos. La narrativa fluye de manera natural, con diálogos que reflejan el habla cotidiana de los habitantes de la región.

Además de su estilo descriptivo, Alegría también incorpora elementos de la tradición oral andina, enriqueciendo la novela con leyendas y cuentos populares. Esta fusión de realismo y folclore añade una capa de profundidad cultural a la obra, resaltando la riqueza de la tradición andina y su importancia en la vida de los personajes.

Crítica Social

"Los perros hambrientos" no es solo una novela sobre la lucha contra la naturaleza, sino también una crítica aguda a las condiciones sociales y económicas de los campesinos peruanos. Alegría expone la explotación y la marginación que sufren estas comunidades, señalando la falta de políticas agrarias justas y el abandono por parte del gobierno. La novela destaca la necesidad de reformas que mejoren la calidad de vida de los campesinos y protejan sus derechos.

A través de sus personajes y su narrativa, Alegría muestra la dignidad y la resistencia de los campesinos, así como su capacidad para enfrentar la adversidad con solidaridad y esperanza. Esta representación humanizadora es un llamado a la empatía y a la acción, invitando al lector a reflexionar sobre las injusticias sociales y a considerar su papel en la creación de un mundo más equitativo.

Conclusión

"Los perros hambrientos" es una novela que ofrece una visión conmovedora y auténtica de la vida campesina en los Andes peruanos. La maestría de Ciro Alegría en la descripción del paisaje y los personajes, junto con su capacidad para abordar temas complejos de manera accesible, hacen de esta obra una pieza fundamental de la literatura indigenista. La novela no solo es relevante por su valor literario, sino también por su contribución a la comprensión de la realidad social y cultural de los Andes.

En resumen, "Los perros hambrientos" es una obra que vale la pena leer tanto por su riqueza narrativa como por su profundidad temática. La novela de Ciro Alegría sigue siendo una lectura esencial para aquellos interesados en la literatura peruana y la historia social de América Latina.

Referencias

Alegría, C. (1982). Los perros hambrientos. Alianza.

Alegría, C. (2009). Los perros hambrientos. Lima: Editorial Peisa.

 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario