Durante los 2 años de confinamiento por COVID-19 en Perú, los
estudiantes universitarios enfrentaron desafíos sin precedentes en su salud
mental. El aislamiento social y la incertidumbre generaron un escenario de aumento
en ansiedad, depresión y estrés. El efecto no previsto en la educación en línea
y la falta de interacción con compañeros y docentes causó una sensación de
soledad además de una incertidumbre en lo laboral recargo la parte emocional
.Muchos lucharon por mantener en equilibrio su bienestar así como también un a
un buen acceso a la salud , pues no todos contaban con los recursos necesarios para abordar sus necesidades .Este periodo
puso en relieve la situación para las instituciones y otras entidades .Es importante Concientizar a los estudiantes
universitarios sobre los desafíos de la
salud mental que atravesaron en el confinamiento en los años 2019-2020.Por ello nuestra tesis
sostiene que la COVID-19 realmente fue
la causa para que la salud mental de los estudiantes universitarios se
incrementará y se haya visto vulnerada , en los siguientes líneas se manifestara con argumentos nuestra
postura.
El COVID-19 ha generado un sin fin de consecuencias en la salud mental
de la población, específicamente estudiantes, los cuales lidian con el
aislamiento social y, a la par, los deberes escolares necesarios para continuar
con su preparación educativa, como lo indican, (Ramírez Castro, I., &
Velazco Capistrán, D. L.2021). Esto destaca verazmente las repercusiones que
generó aquella pandemia en los estudiantes, lo cual provocó un aislamiento
forzado, y un cambio drástico en sus deberes institucionales lo cual no les
permitía seguir preparándose como años anteriores y con la misma disciplina que
ya conocían. Lo que se infiere en este tema es que esta acción generó muchas
consecuencias y trastornos en la salud de los estudiantes, limitándose así en
sus actividades académicas y diarias.
La COVID-19 tuvo
un impacto muy alto en la salud mental, pues tengamos en cuenta que esto llegó
a afectar directamente en la forma de pensar, sentir y actuar, por otro lado,
esta referencia destaca puntualmente las consecuencias y restricciones que
trajo un confinamiento global especialmente, lo cual obligó a que la mayoría de
personas se sometieron diariamente a un estrés continuo por la nueva modalidad
de realizar sus actividades. Además ¿ahondar más en el tema y poder contribuir
con la prioridad de gozar de una salud mental estable? Es primordial que
absolutamente todo ser humano goce de una salud grandiosa, pues esto definirá
su sentir físico y emocional, así como también las interacciones que pueda
tener en la sociedad, pues se mostrará respetuoso y empático con todo aquel que
lo rodea, demostrando así su comprensión e incluso su escucha activa.
La salud mental de los jóvenes se vuelve cada
vez más relevante y preocupante, especialmente en el entorno universitario
donde las condiciones socioambientales pueden afectar significativamente su
bienestar mental. La pandemia del COVID-19 ha sido un ejemplo notable de esto,
conduciendo al aislamiento y a una educación virtual en muchas comunidades
universitarias. Según (Chamorro, Ayquipa,et al, 2023), la pandemia ha generado
una mayor vulnerabilidad en la salud mental de los estudiantes universitarios,
lo que subraya la importancia de que las instituciones prioricen el bienestar
emocional de los estudiantes. En este sentido, las instituciones desempeñan un
papel fundamental al ofrecer recursos de apoyo para que los estudiantes puedan
buscar ayuda y sentirse seguros. Sin embargo, es crucial interrogar a las
instituciones sobre qué alternativas concretas pueden ofrecer para ayudar al
bienestar psicológico de los estudiantes.
¿Cómo pueden fomentar la interacción social y la relajación en un
entorno virtual? ¿Qué recursos en línea y materiales educativos pueden
proporcionar para abordar la salud mental? A pesar de las desventajas que la
pandemia ha creado en la salud cognitiva y el aislamiento de los estudiantes
universitarios, también ha impulsado el desarrollo de nuevas habilidades que
serán valiosas en su futura carrera profesional. La resiliencia, la
adaptabilidad y la capacidad para trabajar de manera remota son solo algunas de
las habilidades que los estudiantes han desarrollado durante esta época. Por lo
tanto, es fundamental que las instituciones universitarias prioricen la salud
mental de los estudiantes y ofrezcan recursos de apoyo concretos para abordar
los desafíos que enfrentan. Al hacerlo, pueden ayudar a construir una
generación más saludable, resiliente y exitosa.
En una
investigación desarrollada se analizaron y desarrollaron métodos cuantitativos
para poder recopilar datos y examinar la relación entre ellos, estimando así
cuatro dimensiones. (Mamani Chipana, R. M., & Luque Ticona, A. M. 2022).
Consideraron, “factor económico, factor salud, factor socioafectivo y
educación. De una población de 56 estudiantes matriculados, se seleccionó, por
conveniencia, una muestra conformada por 42 estudiantes”. Con este estudio realizado se pudo observar
dificultades de dominio de las plataformas digitales y conectividad, generó
estrés y ansiedad. Por otro lado, hubo aproximadamente un 30 % de personas que
perdieron su empleo, generando un impacto económico muy alto en la sociedad,
las personas viendo el problema global que cursaba, lo único que les consolaba
es tener a la familia a salvo y contar con un empleo para poder sobrevivir,
pero no todos corrieron con las mismas oportunidades, ni con el mismo apoyo de
las instituciones para quienes operaban. Este tomo presenta una investigación
relevante y clara sobre las consecuencias en la vida académica y personal de
los estudiantes ante el confinamiento que se vivió, proporcionando datos
concretos sobre los pormenores que se tuvo que afrontar, oprimiendo
drásticamente a una educación virtual. Este enfoque es importante, pues genera
una perspectiva transparente dando a conocer de todo lo que se resistió. A
pesar de estos desafíos se puede destacar los aspectos positivos, que surgieron
en estudiantes, pues llegaron a fortalecer vínculos familiares, como a tener
mayor cercanía con sus seres queridos, a realizar actividades en conjunto que
talvez nunca se dieron. Pese a los obstáculos recibidos, se da un hincapié ante
la crisis epidemiológica, se sugiere la mejora de infraestructura tecnológica y
el importante apoyo emocional cognitivo de los estudiantes, pues a pesar de las
dificultades que tuvieron, se dio también la oportunidad de adquirir nuevas
ventajas de aprendizajes de crecimiento personal y académico.
Los jóvenes deben tener en cuenta que la salud mental no se ve solo como un problema individual, sino también general de nuestro entorno. Esto implica que se debe considerar cómo influyen las condiciones de vida, la economía, la cultura y las redes sociales en el bienestar mental de las personas.(OMS,2022) describió que las intervenciones de promoción y prevención se centra puntualmente en identificar: “Los determinantes individuales, sociales y estructurales de la salud mental, para luego intervenir a fin de reducir los riesgos, aumentar la resiliencia y crear entornos favorables para la salud mental “.La salud mental como un fenómeno que resulta de la interacción de múltiples factores permite una comprensión más holística del bienestar. Este enfoque también resalta la importancia de las políticas públicas y la creación de entornos que favorezcan el bienestar. Por ejemplo, invertir en educación, empleo y servicios de salud accesibles, deben ser significativos en la salud mental de las comunidades. Invertir en educación, salud y empleo no solo mejora las condiciones económicas de las personas, sino que también contribuye a que encuentren un sentido de regocijo al ver una preocupación por cada ser humano, estos son elementos clave para la salud mental.En definitiva, esta perspectiva no solo beneficia a los individuos, sino que además de ello puede vigorizar a las comunidades en agrupación, interactuar a profundidad y tomar acciones concretas para impulsar el bienestar psicológico y construir una sociedad saludable y beneficiosa ,iniciando y creando una cultura de apoyo y resiliencia. Una convocación para todos aquellos sectores a trabajar de la mano juntos en un pro del bienestar mental y promover un entorno favorable para todos.
Estos cambios en las relaciones sociales y las modificaciones de las
condiciones del espacio educativo, sumados a la incertidumbre, el temor, el
estrés y la ansiedad en la pandemia,
generan un impacto en la salud mental de la población, (Vilela Patty,2021).Se
da a conocer las dificultades que han
pasado los estudiantes universitarios frente a cambios drásticos que tuvieron
que sobrellevar ante la epidemia, enfrentándose a la virtualidad tuvieron que
lidiar con sobrecargos de trabajo, la carencia de interactuar con docentes y
compañeros, ha tenido un impacto en la salud mental, conllevando a más estrés y
ansiedad específicamente en estos grupos vulnerables. Es muy impresionante cómo
la pandemia ha acelerado y ha ido evolucionando drásticamente la educación, de
una forma tan repentina haciendo así, que los estudiantes universitarios hayan
tenido que adaptarse a nuevas modalidades de estudio, teniendo dificultades
como: auto aprender, no tener guía estudiantil físicamente y mayor carga de
trabajo. Aunque este proceso de aprendizaje fue difícil, podemos destacar las
nuevas habilidades que obtuvieron a largo plazo. Definitivamente, esta epidemia
nos dio una lección, que las personas pueden ser resilientes, afrontar
desafíos, sin embargo, nos trajo situaciones desfavorables como en la salud
mental. Pero ante todo esto, sería fundamental que las instituciones
implementen estrategias para abordar esta problemática. ¿Qué nuevas
herramientas y estrategias podrían tomar para tratar los problemas de salud,
especialmente a los más vulnerables? Por ello hay instituciones que, para
brindar su servicio de educación mejorado, implementaron cursos que duren menos
tiempo o que las actividades sean grabadas, para que así el estudiante no se
sienta tan abrumado y pueda concentrarse al ver su contenido cuando se sientan
aptos para empezar con su estudio diario.
Si bien es
cierto, que la actividad física es importante para la salud mental, es
preocupante observar que aún personas con trastornos mentales prioricen la
medicación como alternativa de solución. Descubrir actividades como la
meditación, que complementen el tratamiento farmacológico, podrían reducir la
dependencia de los medicamentos, aminorar los síntomas y tener una mejor
calidad de vida a largo plazo. En
(Gestión,2021) el psiquiatra Dr.Humberto Castillo, director general del
Instituto Nacional de la Salud Mental dijo:“ El primer pilar de la terapia en
la salud mental es la actividad física. Es central para mantener una buena
salud mental y va desde mantenerse ocupado hasta la idea de realizar ejercicios
de relajación “. El Dr. Busca resaltar la importancia que es la actividad
física y prácticas de relajación (como por ejemplo la meditación),y en general,
el mantener nuestra mente ocupada puede ser beneficioso y reconfortante para cuidar de nuestra salud mental. También
busca incentivar a las personas a incorporar estas actividades como
herramientas importantes y diarias en nuestra vida cotidiana, pues son buenas
para mejorar el bienestar emocional y no solo eso, sino que además te ayuda
físicamente a sentirte con energía, entusiasmo de realizar tus cosas, como
también transmitir esa actitud a las personas que siempre están a tu alrededor.
Los profesionales de la salud nos ofrecen una gran variedad de estrategias y acciones
para favorecer estilos de vida más saludables en el día a día de nuestra vida.
Sin embargo, muchas personas desconocen la existencia de recursos gratuitos que
podrían apoyar su bienestar emocional. ¿Qué medidas pueden tomar las
instituciones para difundir esta información y alentar a la comunidad a
aprovechar estas oportunidades? Empezando por hacer campañas llamativas a la
vista de las personas, incluso difundir información en redes sociales, visitar
cada distrito o comunidad haciendo llegar campañas de ayuda, atender cada
inquietud de la población, e incentivarlos a poner en práctica cada
recomendación, estar monitoreando los avances y no solo hacerlo por una vez,
las personas al ver la ayuda se sentirán satisfechas y apoyadas que personas
profesionales les brindan la mano.
Fortalecer los
servicios de salud mental para el estudiante es un tema al que le debemos dar prioridad,
ante todo. Por ello, (Zapata-Ospina,et al,2021) describieron que el primer paso
para hacerlo realidad es :” ofreciendo asesoría psicológica, consejería y
acompañamiento emocional gratuito o a bajo costo. Otra propuesta atractiva, con
las instituciones las cuales podrían crear un programa que aborde
específicamente la salud mental de los estudiantes”. Esto se basa en que no
todos los estudiantes tienen o cuentan con las posibilidades de visitar un
psicólogo privado. Si las universidades ofrecen asesoría psicológica gratuita o
a bajo costo, más estudiantes podrían obtener la ayuda necesaria cuando se
sienten abrumados con sus problemas. Estos programas serían de gran amparo,
puesto que muchos estudiantes aprenderán a cómo emplear de mejor manera sus emociones,
y a sobreponerse de todo lo que les afligía. Si desde la universidad se empieza
ayudar a los estudiantes, frente a la sociedad serán mejores personas
reflejando sus aptitudes y desempeñando de buena manera sus actividades. Muchas
instituciones educativas aún subestiman la importancia de la salud mental, este
aspecto se debe priorizar al mismo tiempo como otros servicios puesto que es
una necesidad. Los problemas emocionales y psicológicos son tan importantes
como los físicos, y si no se abordan adecuadamente, pueden afectar gravemente
el rendimiento académico y la calidad de vida de los estudiantes. Porque si un
estudiante no está bien emocionalmente difícilmente se concentrará y aprovechará
su educación al máximo. A pesar de que el bienestar es crucial para el éxito
académico y personal, muchas entidades no le dan la importancia que merece.
¿Qué impide que se implementen programas de salud mental más amplios y
accesibles cuando está claro que los estudiantes se benefician enormemente?
Aunque sí es importante recalcar ya algunas lo ofrecen, hay estudiantes que no
lo toman, por falta de información, por miedo, porque no se le da esa confianza
para que ellos se abran, y peor aún que por todo eso ellos crean que esos
servicios no les servirán de nada.
La persona sin
apoyo en momento de crisis emocionales, tiende a tener inseguridad, inestabilidad,
furia. Las personas necesitamos relacionarnos socialmente y tener amigos en los
que podamos confiar, por ello la capacidad de amar es un componente fundamental
del bienestar y también de la salud mental.(Antti Helin,2023) El tener o contar
con alguien de confianza ayuda a lograr objetivos, asimismo a poder comunicarse
de manera abierta y sincera con los demás, una relación cercana puede reducir
los niveles de ansiedad y dar más sentido a la vida, se incita a que se sienta feliz y a gusto con sí mismo. ONU
dispone de tener relaciones positivas, ayuda a los estudiantes y cualquier otra
persona a poder fomentar la motivación, crear
espacios seguros , lo cual ayuda
a disminuir la ansiedad, depresión, así obtener mayor autoestima y
empatía, de igual manera crear entornos profesionales , familiares y personales
más armónicos A este punto tenemos claro que una persona es vulnerable en
momentos de crisis emocionales , ya que puede experimentar un rechazo ante la
sociedad ,al qué dirán, discriminación por parte de personas sin disciplina,
eso los hace sentirse más cohibidos y sin confianza para contar sus problemas.
Por ello es importante ser empáticos con los demás, brindarles protección y
estabilidad en momentos de dificultad, para sentirse satisfecho y feliz consigo
mismo. Demostrarles que no es una lucha privada, si no que todos podemos
brindar la mano para que esa persona se sienta feliz, crear confianza y
fortalecer los lazos y autoestima, así como la contribución a su crecimiento
personal para encontrar un propósito en la vida. Eso será gratificante para
ellos pues contemplaran que aún existen personas de buenas intenciones que
ayudan con un granito de arena sin pedir ni esperar nada a cambio.
“La salud
mental ha sido durante mucho tiempo un área descuidada de la salud pública en
las Américas. Los gobiernos deben aprovechar la pandemia por COVID-19 como una
oportunidad para reforzar sus servicios de salud mental y hacer las inversiones
necesarias para reconstruir mejor y en forma más justa.” (Filippov,2021,
párr.18). La salud fue descuidada mucho tiempo y sobre todo en todo el contexto
de la COVID-19, se vio vulnerable en la gran necesidad de que los servicios de
la salud sean accesibles para toda persona.
invertir en la salud mental es fundamental para el bienestar como también
para lo económico, lo cual aumentaría la productividad laboral, teniendo a
personas comprometidas y eficientes en su trabajo, de lo cual se debe hacer un
hincapié y hacer un llamado al gobierno para que puedan tomar medidas
inmediatas para la mejora del bienestar, asimismo hacer inversiones en charlas
o capacitaciones y tratamientos con expertos
para que puedan brindar el apoyo necesario y efectivo así obtener una
reconstrucción justa e igualitaria en la salud mental. para toda persona. invertir en la salud mental es fundamental
para el bienestar como también para lo económico, lo cual aumentaría la
productividad laboral, teniendo a personas comprometidas y eficientes en su
trabajo. Oliveira redacta puntualmente que se debe intervenir de inmediato y procurar
al gobierno para la intervención en la salud mental, así se pueda garantizar
servicios y programas de primera que ayuden con el bienestar de la población
que pasó por este problema y que fue muy temido a nivel global. Esto enfoca a
que, ¿Se debería tener un acceso universal y equitativo a los servicios de
salud mental? Pues esta demás decir que si, con eso se busca poder satisfacer
la necesidad de atención a las personas para su mejora y promoverlos a obtener
una mejor calidad de vida, y así nuestros estudiantes obteniendo un servicio de
primera, podrán sacar a flote cada uno de sus conocimientos, aportando con sus
ideas y profesionalismos a una mejora en la economía de nuestro país y para sus
familias. Es importante que
el Gobierno reconozca la negligencia que manejó en la Salud pública, durante la
pandemia, para que, en base a estos errores, se hagan responsables y ofrezcan
nuevas facilidades de acceso y atención de calidad
En conclusión, los especialistas e instituciones que abordaron este tema
tenían entendido que la salud mental en el ser humano es valiosa para su vivir prosperó.
Pues las dificultades y restricciones que dejó un confinamiento de 2 años fue
muy agravante, adolescentes presentaron dificultades de aprendizaje, un estrés
diario y sumado un 30% de padres de familia que quedaron sin empleo y con la
preocupación de cómo sustentar su hogar. Es por eso que muchas entidades al ver
a la sociedad totalmente desconcertada y buscando apoyo, profesionales de la
salud dedicaban espacios con recomendaciones para mejorar la situación,
asimismo las instituciones educativas hasta hoy en día siguen buscando como
brindar ayuda en la salud mental a cada estudiante. Una salud mental favorable
conduce a una imagen positiva, relaciones satisfactorias, a tomar decisiones
adecuadas y sobre todo afrontar los desafíos de la vida. Realmente la COVID-19,
si fue la razón de que las personas se vean vulnerables con su salud mental a
la vez física. Por ello se espera que las entidades sigan trabajando día a día
para poder proteger y garantizar un bienestar favorable a nuestras generaciones
presentes y futuras.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:
Chamorro, M. R., Ayquipa, H. B., Florián, F.
P., & Gamero, A. M. (2023). La salud mental en los jóvenes universitarios:
un desafío para las instituciones. Atención
Primaria Práctica, 5(4), 100182. https://doi.org/10.1016/j.appr.2023.100182
Filippov, A. (25 de noviembre del 2021). El efecto devastador del COVID-19 en la
salud mental. Noticias ONU/Mirada global Historias humanas. https://news.un.org/es/story/2021/11/1500512
Gestión, (2021, febrero 05). Tres estrategias para cuidar la salud
mental durante la cuarentena.
Mamani
Chipana, R. M., & Luque Ticona, A. M. (2022). Impacto del Confinamiento por
COVID-19 en estudiantes universitarios.
https://revistas.unjbg.edu.pe/index.php/vyh/article/view/1484
OMS, (2022, junio 17). Salud mental : fortalecer nuestras
respuestas https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/mental-health-strengthening-ourresponse/?gad_source=1&gclid=CjwKCAjw8rW2BhAgEiwAoRO5rFTZbd6hz2sR1eIZzRyKunZZjISo1F2dxAMlBbfml4rGu4bF_DspfhoCi3kQAvD_BwE
Ramírez Castro, I., & Velazco
Capistrán, D. L. (2021). Consecuencias de la COVID-19 en la
salud mental de los estudiantes. Revista Científica Multidisciplinar, 5(1),
1-12. https://pdfs.semanticscholar.org/114f/2b18690c2fc8f39e11cbf680f462fee55bd9.pdf
VILELA, Patty; SANCHEZ,
Javier y
CHAU, Cecilia.Desafíos de la educación superior en el Perú durante la
pandemia por la covid-19. Desde el Sur
[online]. 2021, vol.13, n.2, e0016.ISSN 2076-2674. http://dx.doi.org/10.21142/des-1302-2021-0016.
Zapata-Ospina, J. P., Patiño-Lugo, D. F.,
Vélez, C. M., Campos-Ortiz, S., Madrid-Martínez, P., Pemberthy-Quintero, S.,
Pérez-Gutiérrez, A. M., RamírezPérez, P. A., & Vélez-Marín, V. M. (2021).
Intervenciones para la salud mental de estudiantes universitarios durante la
pandemia por COVID-19:https://doi.org/10.1016/j.rcp.2021.04.007
No hay comentarios.:
Publicar un comentario