¿Hasta qué punto se ha normalizado la injusticia y
el abuso de poder sobre los más débiles? Esta pregunta sigue vigente en las
relaciones sociales y se refleja claramente en la literatura peruana; Muestra
de ello es el cuento Paco Yunque. Escrita por el reconocido escritor César
Vallejo, nacido en Santiago de Chuco el 16 de marzo de 1892 y fallecido en
París en 1938. Dedicó su vida a denunciar la desigualdad y la opresión social.
Su ideología estuvo marcada por una profunda sensibilidad hacia los pobres y marginados,
influenciada por sus convicciones socialistas. Su ocupación principal fue la de
poeta, narrador, ensayista y dramaturgo, y su motivación constante fue mostrar
las injusticias de la sociedad a través de un lenguaje sencillo, pero impactan.
En ese camino, escribió el cuento “Paco Yunque”, publicado de manera póstuma en
1951, el cual posteriormente fue traducido al quechua y al Aymara. La narración
presenta la historia de un niño humilde que sufre maltratos por parte de
Humberto Grieve, hijo del alcalde, reflejando así la injusticia y el abuso de poder, la humillación como muestra de
discriminación, y la desigualdad en el ámbito escolar.
El cuento Paco Yunque de César Vallejo es una denuncia profunda
sobre la injusticia y el abuso de poder que se vivían en la sociedad peruana de
su época, pero que lamentablemente aún se perciben en la actualidad. Desde las
primeras páginas, el autor muestra con crudeza cómo el poder y la autoridad se
alían con los privilegiados, dejando desamparados a los más débiles. Un claro
ejemplo se observa cuando “Humberto le quitó el cuaderno a Paco y el maestro no
dijo nada” (Vallejo, 1951, p. 7). Este acto, aparentemente pequeño, encierra un
mensaje fuerte: el silencio de la autoridad ante el abuso es una forma de
complicidad. El maestro, que debería representar la justicia y el respeto, se
convierte en un símbolo de la indiferencia social frente al sufrimiento de los
humildes.
Este episodio muestra cómo las instituciones —en este caso, la escuela—
reproducen las mismas desigualdades que existen en la sociedad. Paco, el niño
pobre, representa al pueblo silenciado, mientras que Humberto Grieve simboliza
a las clases dominantes que se sienten con derecho a todo por su apellido
suposición. Fernández (2019) afirma que “Paco Yunque denuncia el abuso de
poder como una constante en la estructura social peruana” (p. 54), lo cual
confirma que Vallejo no solo retrata un conflicto entre niños, sino un sistema
entero donde los privilegios pesan más que la justicia.
En la actualidad, esta problemática sigue vigente: existen autoridades
que protegen a los poderosos y castigan al que menos tiene voz. Es un círculo
que se repite en distintos contextos, desde las escuelas hasta las
instituciones públicas. Por eso, el cuento nos obliga a preguntarnos: ¿cuántas
veces el poder calla frente al abuso? ¿Cuántas veces la justicia se inclina
ante el dinero o la influencia? En conclusión, Paco Yunque no solo es
una historia literaria, sino una lección moral que nos invita a reflexionar
sobre la necesidad de un cambio social profundo, donde la autoridad deje de ser
cómplice del abuso y comience a actuar con verdadera equidad y empatía hacia
los más vulnerables.
Otro de los grandes temas que aborda César Vallejo en Paco Yunque
es la discriminación social expresada a través de la humillación. La el cuento
nos enseña cómo los niños reproducen los mismos prejuicios y diferencias que
observan en los adultos, revelando así una sociedad profundamente desigual. En
una escena significativa se menciona: “A Paco lo humillaban por ser hijo de un
sirviente” (Vallejo, 1951, p. 6). Este fragmento muestra cómo el desprecio
hacia Paco no se basa en sus acciones o actitudes, sino en su origen humilde.
La humillación se convierte, entonces, en un mecanismo que justifica la
exclusión y perpetúa la desigualdad.
Vallejo refleja con gran sensibilidad la manera en que el niño
protagonista sufre el rechazo de sus compañeros y la indiferencia de su
maestro. La escuela, que debería ser un espacio para aprender valores de
respeto e igualdad, se transforma en un lugar donde los prejuicios de clase se
refuerzan. Ramírez (2018) sostiene que “Paco Yunque revela la discriminación
que sufren los niños pobres en un entorno que reproduce las jerarquías sociales”
(p. 62), lo que demuestra que la obra trasciende el ámbito educativo y se
convierte en una crítica al sistema social.
Esta discriminación no solo
ocurre en el cuento, sino también en la realidad actual, donde aún se
discrimina por el color de piel, la forma de hablar o la situación económica.
Muchas veces, la burla o la humillación parecen inofensivas, pero en realidad
generan heridas emocionales profundas que marcan a las personas desde la
infancia. Paco Yunque nos recuerda que la humillación no educa,
destruye; no corrige, hiere; y no enseña justicia, sino miedo.
Por ello, esta obra invita a reflexionar sobre la urgencia de construir una sociedad más empática y solidaria, donde las diferencias no sean motivo de burla, sino de aprendizaje mutuo. En conclusión, la humillación como forma de discriminación, tan presente en el cuento, sigue siendo un espejo incómodo de nuestro presente. Vallejo nos enseña que el cambio social empieza cuando dejamos de reírnos de los débiles y comenzamos a defenderlos.
Uno de los aspectos más impactantes de Paco Yunque es cómo
retrata la desigualdad dentro del espacio escolar, un lugar que, en teoría,
debería ser justo e igual para todos. Vallejo evidencia que la educación
también puede ser un reflejo de la estructura social injusta. Lo deja claro
cuando afirma que “El hijo del alcalde siempre tenía privilegios en la escuela”
(Vallejo, 1951, p. 12). Este fragmento revela que el trato diferenciado no se
basa en méritos académicos, sino en el estatus social y el poder de las
familias.
El autor critica de forma implícita la corrupción moral de las
instituciones, donde el apellido y la riqueza otorgan ventajas y eximen de
castigos. Mientras Paco es visto con recelo y humillado por ser pobre, Humberto
Grieve goza de la protección de los maestros y del sistema. Martínez (2018)
señala que “la escuela en Paco Yunque es un microcosmos de las desigualdades
sociales” (p. 41), confirmando que el aula no es un refugio de equidad,
sino un espejo de la injusticia.
Esta realidad no es ajena al presente: en muchos colegios y
universidades, los estudiantes de bajos recursos enfrentan obstáculos que otros
no. Desde el acceso a materiales educativos hasta el trato de los docentes, las
diferencias se notan y se sienten. La obra de Vallejo, aunque escrita hace
décadas, continúa siendo actual porque refleja cómo las oportunidades dependen
muchas veces de la posición social más que del esfuerzo personal.
En este contexto, la pregunta que plantea el cuento sigue siendo válida:
¿cómo lograr que la escuela sea un espacio donde todos tengan las mismas
oportunidades? La educación debe ser el camino para romper las barreras de la
desigualdad, no para reforzarlas. En conclusión, Paco Yunque nos deja
una valiosa lección: mientras la educación siga diferenciando entre ricos y
pobres, no habrá verdadera justicia ni progreso. Solo cuando la escuela se
convierta en un espacio de igualdad y respeto podremos hablar de una sociedad
realmente justa e inclusiva.
Conclusión:
En conclusión, el cuento demuestra que cuando la autoridad protege al
poderoso y calla al débil, se refuerza un sistema de injusticia que afecta a
los más vulnerables. Esto no solo pasa en el relato, sino también en la vida
real, donde muchas veces los abusos quedan impunes. La lección que deja Vallejo
es que la justicia debe estar por encima del poder, y no al revés.
Finalmente, la humillación que sufre Paco representa cómo la
discriminación por la clase social marca la vida de los niños pobres. Este
problema no es algo del pasado, porque todavía se siguen burlando de quienes
tienen menos. La conclusión es que la obra busca crear conciencia sobre el daño
que genera la exclusión y cómo la burla perpetúa la desigualdad.
En resumen, la desigualdad escolar en Paco Yunque refleja que la
educación, en lugar de ser un espacio justo, muchas veces repite las mismas
diferencias sociales que hay en la sociedad. Vallejo nos invita a pensar en
cómo transformar la escuela en un lugar de igualdad real, donde todos los niños
tengan las mismas oportunidades sin importar su origen.
REFERENCIAS
ü
Hart, S. (2009). César
Vallejo: Narrativa completa. Madrid: Cátedra. https://www.catedra.com/libro/cesar-vallejo-narrativa-completa
ü
Martínez, R. (2018). La
escuela como espacio de reproducción social en la literatura peruana. Lima:
Fondo Editorial UNMSM.
https://fondoeditorial.unmsm.edu.pe/catalogo/la-escuela-como-espacio-de-reproduccion-social-en-la-literatura-peruana
ü
Ramírez, L. (2018). Infancia
y discriminación en la narrativa de César Vallejo. Revista Andina de
Letras, 12(2), 55–68. https://revistaandinaletras.unmsm.edu.pe/article/view/ramirez2018
ü
Vallejo, C. (1951). Paco
Yunque. Edición póstuma. Recuperado de: https://www.textos.info/cesar-vallejo/paco-yunque/ebook.
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